Orgullo 2023:
Churros con Chocolate

Tomando su nombre del dulce favorito de los españoles, que suele comerse a primera hora de la mañana después de una noche de fiesta, un grupo de amigos montó Churros con Chocolate en un pequeño bar del barrio del Raval de Barcelona en 2011. "Barcelona siempre ha tenido una escena LGBTQIA+ vanguardista que era muy diversa en atmósferas y estilos de música, pero no todo en la misma fiesta", dice Luis Alcalá (él), quien fundó la noche con Puy Ruiz de Alda (AKA DJ Chica Barata) y Manuel Ponce (él). 

Al mismo tiempo que las familias barcelonesas se reúnen para la misa de los domingos, los juerguistas de Churros con Chocolate comienzan a vestirse para celebrar las libertades LGBTQIA+ en todo su esplendor. "Nos inspiramos en esos pequeños bares y pubs con espectáculos de drag estilo cabaret, pero también en la escena de los domingos en Madrid", dice Alcalá.  

A partir de su hogar original, se mudaron a la famosa y antigua sala de conciertos Sala Apolo en Avinguda del Paral·lel, cuyas salas de cabaret habían sido un refugio bohemio durante la época franquista. "Apolo era un viejo teatro de dos pisos, y nos permitió crecer y hacer una familia más grande para los llamados churreros", dice Alcalá. "La forma en que presentamos la fiesta, desde las decoraciones hasta las actuaciones, fue muy propia y casera. Esa fue la clave de nuestro atractivo".     

Ya sea un cabaret de la legendaria reina del Paral·lel Merche Mar, un espectáculo de drag de Vanity Milan o el disfraz más fabuloso de uno de los churreros, su espíritu de fiesta es de creatividad colectiva. "Desde el principio invitamos al público a ser parte de la fiesta con nosotros y estamos muy orgullosos de ello", dice Alcalá.  

Musicalmente, Churros con Chocolate se deleita en lo inesperado, donde el pop burlesco choca con el techno y un éxito de Kylie Minogue se cuela junto al camp rock de Mojinos Escozíos. "Nuestro lema es 'todo vale'", dice Alejandro Asencio (él), copresentador y programador de Churros con Chocolate y también de las fiestas Lady Olé de Londres. "La sorpresa es algo que está en nuestro ADN y que siempre nos guiará. Eso es lo que le gusta a nuestra gente".   

Churros con Chocolate también organizan fiestas en Madrid y Valencia, dejando un legado en la vida nocturna de toda España. "Creo que haber llevado la fiesta de una pequeña reunión de amigos a estos grandes eventos interculturales en los que todos los miembros de la comunidad pueden participar es algo de lo que estar muy orgulloso", dice Asencio.  

Si tienes la suerte de estar en la ciudad para una de sus fiestas mensuales, asegúrate de llegar temprano para que puedas hacerte con un plato de churros antes de que se agoten. 

Habéis encontrado un hogar acogedor en la Sala Apolo, pero ¿cuáles son las principales barreras para crear este tipo de espacios en España o Barcelona hoy en día?   

Luis: Los locales y los propietarios tienen una dinámica en la que muchas veces es difícil entrar. Esto puede ser una gran barrera para las nuevas ideas. En ciudades como Barcelona, Madrid o Valencia es más fácil, pero en ciudades secundarias y capitales de provincias más pequeñas, esas dinámicas son menos flexibles, más ancladas al pasado y, por tanto, más difíciles de superar.  

Alejandro: Lo bueno ahora mismo es que los gobiernos, tanto en España como a nivel local en Cataluña, son de izquierdas y bastante alineados entre sí. Están llevando a cabo muchas nuevas políticas feministas y LGBTQIA+ nunca antes vistas. Por fin parece que tenemos más visibilidad y protección. 

¿Cómo habéis visto cambiar la vida nocturna LGBTQIA+ en Barcelona desde que empezasteis y qué papel habéis desempeñado en ello?   

Luis: Hemos dejado de ser solo un ghetto gay. El boom de las fiestas y festivales de los domingos también ha ayudado a este cambio y ya no se esconde en la noche. Todo cambia un poco cuando todavía es de día, es un ambiente diferente. Hemos pasado de estar cerrados los domingos a ser el mejor día para salir de fiesta. 

Alejandro: Lo de la tarde es importante, porque ya no parece que como persona LGBTQIA+ solo salgas por la noche cuando estás escondido. Sales de día y ayudas a normalizar las cosas y a cambiar la mentalidad de la gente. Verán a las drag queens en los bares antes de entrar al club y haciendo cola para entrar. Esa es la mitad de la batalla ganada, seguro. 

Incluso antes de la pandemia, los locales y los espacios se estaban perdiendo por el desarrollo tan rápido en las ciudades. ¿Qué se debe hacer para abordar esto?   

Luis: En el caso de España, creo que la escena de los clubes y la vida nocturna deberían tener un estatus cultural adecuado. Por ejemplo, no se debe permitir que un teatro o un club sea una oficina o un supermercado. Si estamos protegidos como un escenario cultural y respetuoso, no como 'vida nocturna' o el horrible término 'ocio nocturno', es menos probable que cierren.   

Alejandro: Durante la pandemia Berlín aprobó una ley que dice que las discotecas son espacios culturales, y que un DJ, por ejemplo, es un artista, por lo que pueden tener acceso a subvenciones como muchos otros. Deberíamos ser tomados en serio de la misma manera.  

¿Veis algún rayo de esperanza con respecto a los locales?   

Luis: La pandemia nos hizo ser escépticos sobre el futuro. Aunque nos hemos recuperado, nos llevamos un verdadero susto, y esto siempre nos acompañará. Lo que se ha demostrado es que los clubs y las pistas de baile tienen que estar llenos, con gente sudando y bailando juntos, mientras el personal y los promotores trabajan para que todo sea seguro.  

Alejandro: Por supuesto que existe el riesgo de perder locales, pero creo que nuestra comunidad siempre ha estado a la vanguardia. Siempre hemos creado espacios que antes no existían, así que ¿por qué no seguir haciéndolo? Puede que no haya tantos clubs como antes, pero encontraremos otros espacios para reunirnos.  

De transfobia a homofobia, la escena de los clubs LGBTQIA+ se ha enfrentado a batallas tremendas. ¿Cuáles son los principales factores a los que se enfrenta en la actualidad?   

Luis: La transfobia y la homofobia no son movimientos del pasado, hoy seguimos librando esa batalla. De hecho, los delitos de odio han aumentado en los últimos años a medida que la política de extrema derecha ha aumentado y su discurso ha comenzado a aparecer libremente en las redes sociales y en las campañas. Esta normalización es extremadamente peligrosa y supone una amenaza real para todas las minorías que se enfrentan a una reacción violenta contra las libertades logradas hasta ahora.  

Alejandro: No todos los enemigos son externos. También nos enfrentamos a batallas internas relacionadas con la discriminación por edad, la política del cuerpo y los problemas de salud mental.   

El gobierno español acaba de aprobar la nueva Ley Trans. ¿Qué más te gustaría que hicieran?   

Alejandro: Nos encantaría que desarrollaran mecanismos que protegieran estas leyes, especialmente en el actual clima político tan polarizado, donde los gobiernos cambian con frecuencia. Debemos asegurarnos de que cualquier paso progresista en la política social permanezca intacto en el futuro.   

También habéis participado en la iniciativa No Callem. ¿Podéis hablarnos de eso?   

Alejandro: No Callem significa en catalán 'No nos callaremos'. Se trata de una iniciativa LGBTQIA+ y feminista del Ayuntamiento de Barcelona diseñada específicamente para la industria del ocio nocturno de la ciudad. El protocolo tiene como objetivo capacitar a todas las personas en el lugar de trabajo para que las situaciones de violencia de género o violencia sexual puedan ser detectadas, prevenidas y tratadas en caso de que ocurran. Se centra en el apoyo y la protección de la víctima, así como en informarle de su derecho legal a ejercer la acción penal contra el delincuente.   

¿Puedes contarnos un poco sobre Punt Lila y cuáles son sus objetivos?   

Luis: Punt Lila (el punto lila) se enmarca dentro del protocolo No Callem. Es la iniciativa que ha tomado el Observatori contra l'Homofòbia, junto con el Club Apolo, de poner un punto de información y ayuda permanente en cada evento que organizan, para que el personal formado profesionalmente pueda estar a mano.   

¿Cómo de importante es que marcas como COS se conecten con la comunidad LGBTQIA+?  

Luis: Muy importante. Recaudar fondos para la comunidad LGBTQIA+ nunca es suficiente. Siempre hemos sido muy conscientes de esto, no solo con Churros con Chocolate sino emprendiendo otros proyectos solidarios con otros promotores. Siempre tratamos de compartir nuestro éxito con ONGs, asociaciones locales y otras comunidades para ayudar a que sus proyectos salgan a la luz. Marcas como COS, que son más conocidas y pueden llegar a todo el mundo, funcionan como una especie de vínculo entre todos nosotros.     

¿Cuál fue la inspiración detrás del diseño de la camiseta? 

Luis: Los diseños de nuestras camisetas reflejan los carteles del club, que ilustran nuestras raíces en las divas, los disfraces y nuestros invitados extravagantes.